David, Claudia y Jaime en León, Nicaragua
VARIACIONES SOBRE EL MISMO TEMA
I
La poesía
es un agujero negro
florecido en mi galaxia:
Todo en
mí
tiende
hacia ella.
II
La palabra es mi aldea,
mi pueblo, mi país;
el recodo final
de todos mis caminos.
La palabra es mi fe,
mi dogma, mi religión;
el soplo que me mata,
el aliento que me resucita,
Mi Zahir.
III
La poesía
es una manera ingenua de
definirnos:
Detrás de cada verso
nos insinuamos
y vamos desnudándonos
al término de cada estrofa.
Con o sin rima
un jirón del alma
se queda prendido
en el papel.
En cada poema
nos agitamos,
caemos, cual trémula gota,
sobre la hoja
desangrándonos.
La poesía es una trampa.
Una regurgitación.
Una necesidad absurda
de perdernos y encontrarnos,
de reconocernos,
de palparnos.
Es la forma más terca
de masturbarnos
La poesía
es un manifiesto impúdico
y si la publicamos
es porque todavía nos avergüenza
salir desnudos a la calle.